lunes, 26 de diciembre de 2011

El general west moreland

En la compañía, teníamos desde luego mucha mala leche para los motes. Había dos hermanos, que eran como los policías, el policía malo y el policía bueno. Uno de ellos era Jefe de Personal, lo que hoy vulgarmente se le llama Recursos Humanos, y que puso una frutería, pero eso es otra historia, que merece ser contada en otra ocasión.

El hermano bueno, era conocido como el General West Moreland, que existió de verdad, al mando de las tropas de los USA en Vietnam.

Le llamaba el general por un lado por el parecido al original, y por otro al hacerse unas tarjetas de visita de inspector general.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Seguros Arguelles

Ya en 1984 y cuando estaba todo perdido por culpa de los inocentes funcionarios de la Dirección General de Seguros, y el cierre prácticamente echado, el Maassa llegó a una especie de acuerdo con otra aseguradora, para la cesión de la cartera de Aseguradora Al-Andalus, a Seguros Arguelles, de los madriles.

Tampoco hubo suerte, pues cerraron también Arguelles, alegando que la cesión de cartera debía ser previamente autorizada por la Dirección General de Seguros.

Una encerrona, para quitarnos del mercado.

Molestábamos.

jueves, 8 de diciembre de 2011

broma ford fiesta verbena

Una de las primeras bromas que hice estando todavía en Aseguradora Andaluza, fue una composición sobre el anuncio en periódico de un ford fiesta. Lo recorté y añadí un nuevo modelo: el ford verbena, disponible sólo para empleados de seguros, y con unas inmejorables condiciones:
3 euros de entrada, y 6 euros mensuales durante un porrón de años.

No me dió tiempo a terminar la composición de fotocopias, entre otros motivos porque no teníamos fotocopiadora (ni nosotros ni nadie, que estábamos aún en 1980), y dejé el anuncio casi terminado en un cajón de mi mesa.

Por casualidad, ese cajón lo abrió el general west moreland, de quien más adelante hablaré, y lo mostró al personal, llegando al generalizado cachondeo cuando maicanita llamó a la ford, preguntando por la promoción, y le dijeron: señorita, me temo que le han tomado el pelo.

viernes, 2 de diciembre de 2011

Insondable clave 80 carapapa

El pobre CaraPapa no le caía bien a nadie, tal vez por su prepotencia al ser cuñado de la primera mujer del Maassa.

Cuando se hacía un seguro, solía generarse una comisión para quien lo lograra, pero los que se hacían en la oficina, existía la obligación de ponerlo a la clave 80, y así se solía preguntar jocosamente:

· ¿pá quien es la comisión?
· Parra, se solía contestar.

Un inocente juego de palabras, con el que nos divertíamos.